Oncotype DX Stories
Laurie L.
Su oncólogo recomendó usar el análisis Oncotype DX.
Se sintió aliviada cuando su Puntaje de Recurrencia de 17 indicó que tenía un riesgo relativamente bajo de que su cáncer reapareciera.
Laurie, autora de no ficción publicada y antropóloga formada en Harvard, no era ajena al cáncer, habiendo sobrevivido al linfoma no Hodgkin en Estadio IIIB en 1977, a la edad de 27 años. En ese entonces, Laurie fue tratada con radioterapia y un largo ciclo de quimioterapia.
Sin embargo, eso no sirvió para aliviar el shock cuando una mamografía anual resultó anormal en noviembre de 2005. “Tuve la corazonada de que era cáncer de nuevo”, dijo Laurie, quien ahora tenía 58 años. Una biopsia confirmó sus sospechas.
Laurie ya tenía un oncólogo en el que confiaba, y este convocó a un cirujano y a un radiólogo. Como Laurie se había sometido previamente a radioterapia, su equipo médico no estaba seguro de que una tumorectomía (lumpectomía) fuera una opción viable. Afortunadamente, el equipo localizó sus registros médicos de hacía tres décadas y fue posible administrarle radioterapia de tal manera que Laurie pudo hacerse una tumorectomía en lugar de una mastectomía. Como sus márgenes no estaban claros después de la primera cirugía, Laurie se sometió a dos cirugías.
Con mi historial, volver a pasar por la quimio habría sido terriblemente arriesgado.
Inició la terapia hormonal de inmediato, pero quiso evitar la quimioterapia porque ya había recibido quimioterapia para su linfoma. “Con mi historial, volver a pasar por la quimio habría sido terriblemente arriesgado”, dijo Laurie.
Su oncólogo recomendó el uso del análisis Oncotype DX para determinar el probable beneficio que Laurie obtendría de la quimioterapia. Se sintió aliviada cuando su Puntaje de Recurrencia de 17 indicó que tenía un riesgo relativamente bajo de que su cáncer reapareciera. Con estos resultados, Laurie, en estrecha consulta con su oncólogo, optó por renunciar a la quimioterapia. “Hay tan pocos recursos que ofrezcan ese grado de orientación, dirección e información para tomar las decisiones de tratamiento”, dijo Laurie. “Sentí como si la ciencia realmente estuviera cuidando de mí”.
Laurie completó la radioterapia y está en un ciclo de cinco años de terapia hormonal. Sigue siendo muy activa físicamente: es una ávida excursionista, nadadora de larga distancia y practicante de taichí.
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