Oncotype DX Stories
Penny S.
Penny le atribuye a la prueba el haberle devuelto el control de su enfermedad y su vida.
Penny tenía más decisiones de tratamiento que tomar, pero luchaba por entender exactamente qué tipo de cáncer de mama tenía.
En junio de 2004, a la edad de 55 años, Penny se hizo una mamografía que despertó algunas preguntas sobre su mama derecha. Las mamografías adicionales, incluyendo algunas con aumento, no fueron concluyentes, así que Penny siguió con su vida, disfrutando de su jubilación después de haber trabajado como analista de sistemas de información.
Entonces, en diciembre, durante su examen ginecológico anual, el médico de Penny encontró un bulto en su seno derecho. Una mamografía, una ecografía y una biopsia posteriores confirmaron que Penny tenía cáncer de mama.
“Cuando recibí la llamada del cirujano, mi esposo y yo perdimos la cabeza. Pensé que me estaba muriendo. Sentía que no tenía control”.
En marzo de 2005, Penny se sometió a una doble mastectomía y la cirugía reveló que tenía un carcinoma lobular de mama, que afortunadamente no se había extendido a sus ganglios linfáticos.
Cuando recibí la llamada del cirujano, mi marido y yo perdimos la cabeza.
Penny tenía más decisiones de tratamiento que tomar, pero luchaba por entender exactamente qué tipo de cáncer de mama tenía. Afortunadamente, una amiga del grupo de estudio bíblico de Penny trabajaba para Exact Sciences, y le explicó que debido a que su tumor estaba clasificado como cáncer con ganglios linfáticos negativos y positivo para receptores de estrógeno, ella podría usar una prueba llamada Oncotype DX para determinar la probabilidad de que su cáncer reapareciera.
El médico de Penny ordenó la prueba. El resultado de su Puntaje de Recurrencia fue de 13, lo que indicaba que había un bajo riesgo de que el cáncer de mama regresara. Penny y su médico decidieron que renunciaría a la quimioterapia y optó por recibir solo radioterapia y terapia hormonal. Penny le atribuye a la prueba el haberle devuelto el control de su enfermedad y su vida.
Hoy en día, Penny está más sana y ocupada que nunca, cultivando y vendiendo frutas y verduras en el mercado de los granjeros, haciendo vino con su marido y cuidando de más de 70 animales que viven en su terreno.
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